El recién publicado disco llegará a la Sala Caracol para hacer vibrar a su público
Los chicos de Nadye estrenan un nuevo LP tras cinco años de su anterior trabajo ‘El Último Minuto’
Nunca es suficiente si se hace desde el corazón. Nunca es suficiente si hay sentimiento. Puedes haber girado por cincuenta, por cien salas. Durante meses o durante años. Por toda España, con grandes artistas o con tus mejores compañeros. Podrías pensar que hasta ellos, que parece haberlo hecho todo, habían alcanzado sus objetivos tras años sin una nueva publicación. Pero esto no sucede con Nadye. ¿Por qué? No importa cuánto hayas hecho ni cómo lo hayas llevado a cabo, Nadye es pura actitud, es esencia, autenticidad y, como decíamos, es sentimiento, algo que ahora plasman en este nuevo disco, que tanto estábamos esperando: ‘Intrapolar’. Porque como Nadye, somos inconformistas.

Este lanzamiento nos muestra la nueva cara de la banda, con Javier Salas como frontman, junto a Mario Checa, Luismi García y Abel Vargas, siendo esta la última formación del grupo, con la que llevan trabajando en conjunto ya dos años. Ahora todos ellos plasman su propia marca y autenticidad en ‘Intrapolar’, transparentes, sinceros, personales… como no podía ser de otra manera. Tanto que ellos mismos han grabado en La Caverna Estudios (de Javier Salas), con una producción a cargo del propio grupo y unas mezclas finales en las que Estudio Uno se encargó de poner la magia. Un trabajo con el que los chicos siguen manteniendo la esencia con la que comenzaron en 2012 con su ‘Las noches que pierdo el camino’, un sonido fresco que no duda en mojarse en el punk rock, pero que en esta ocasión, también torna hacia tintes mucho más indies, como matiz de madurez. Y aún con todo, Nadye no olvida su contundencia, su magia, su energía.
De momento, ‘Intrapolar’ nos ha dejado con himnos como su single y primer adelanto del disco, «Boca A Boca», que podíamos disfrutar a finales de diciembre del pasado año. Con ello, presentaban toda una declaración de intenciones (y de amor) bajo unas letras contundentes, directas, llenas de fuerza… «Puedo ser letal, certero y de verdad. Pero al final no importa, no importa…» o quizás sí. Tendremos que comprobarlo.