King Sapo recuperan el reino de la capital con ‘Lengua Púrpura’
El Teatro Muñoz Seca auspició el ritual rock de su nuevo EP en Madrid
Como ya parece habitual, el rock inundaba un nuevo teatro en la capital. A pesar de no ser su medio natural, sin embargo el ecosistema que abordaban las butacas ayudó a crear la atmósfera perfecta para la ocasión. Minutos antes del comienzo de esta presentación, nos encontramos con un público expectante, deseoso de ver de nuevo a la banda, tras unos meses fatídicos en los que pudimos ver cómo se aplazaban las fechas de los conciertos rock anunciados y este género se iba apagando en nuestra gran ciudad.
Pero el grupo regresaba para dar luz, mucho color y grandes señales de vida. De hecho, los experimentados músicos están más vivos que nunca, ya que a pesar de los condicionamientos actuales
King Sapo han sabido adaptar su directo para crear un fervor creciente y hacer palpitar a su público de una manera inesperada.
Y es que quizás un teatro no era tan mala idea, teniendo en cuenta el dramatismo de la situación, este renacer en un nuevo formato tan bien vestido por la banda y la presencia de las canciones como si de diferentes actos de una gran obra, repartida entre este último EP y su anterior trabajo (‘Niño Gurú’, LP de 2019), se tratara.
Imágenes de la presentación a prensa en La Parada del Diablo
Las luces se encendían para hacer pasar por la tarima a cada uno de los miembros de King Sapo, Jesús Trujillo a la voz junto a una guitarra acústica que aportaría la melodía de esta primera parte del concierto, acompañando al hipnótico punteo de Andrés Duende a la guitarra, Javier Planelles a la batería y Jose Alberto Solís al bajo. Así comenzaba este nuevo capítulo del que pudimos disfrutar en la presentación a prensa, con “Vida y Agua”, rompiendo el silencio de la sala con la inimitable voz de acentos canarios y textura áspera de Jesús, para introducirnos poco a poco en una experiencia adictiva que nos fue atrapando a lo largo de cada tema.
Unas guitarras que nos envolvían en este universo acústico de alta intensidad junto a la excelente combinación en el juego percusivo entre la caja y toms de la batería y la enriquecedora línea de bajo sobre la que se apoyaba este primer tema, y que se sucedió en los siguientes
“Ella (Otra Dimensión)” con toques arabescos, aportando gran misticismo al corte, e “Insomnios”, de su primer disco, que hizo arrancar los primeros aplausos y vítores de acompañamiento y que fue adaptado con excelencia para este primer bloque del concierto, en el que vimos disfrutar tanto a artistas como público, jugando con un puente instrumental in crescendo que acabó por cortarnos la respiración del puro éxtasis final.
Unos prolongados aplausos daban la oportunidad de hacer un cambio de guitarra por parte de Andrés a una eléctrica, mientras Jesús, arropado con la acústica, desnudaba su voz en las primeras estrofas de “Libre”. Un momento muy emotivo que acababa en un breve silencio y luces intimistas sobre la tarima, para hacer sonar (y crecer) por momentos al solitario bajo de Jose, como si de un ligero susurro se tratase, al que fueron uniéndose batería y guitarra progresivamente mientras las luces se tornaban carmín, alargando el tema para de nuevo hacernos subir las pulsaciones con total maestría y llegar a un clímax final donde de nuevo Jesús se incorporaba con su voz a este espectacular ritual.
Tras terminar este tema, la banda nos hacía una pequeña introducción sobre esta declaración de intenciones, que han materializado en el ‘Lengua Púrpura’ del que poco a poco se va conociendo más (en las plataformas digitales).
“Un EP acústico grabado en directo, durante un solo día, buscando la mejor toma. Ha quedado así, sin trampa ni cartón, como fue conseguido”.
Así, también nos explicaban cómo la situación actual había interrumpido fechas de su anterior gira, con un disco, ‘Niño Gurú’, que también ahora tiene mucho que aportar a este enriquecedor directo, dando paso a unos primeros acordes ensoñadores de “Lengua Púrpura”, tema que da nombre al EP, después de unos merecidos aplausos del patio de butacas. “Lume (Folk)” daba continuidad al concierto, una revisión del tema del anterior disco que ahora recoge de manera acústica acentuados tintes de clásico rock setentero de Neil Young o Nick Drake, para transicionar eléctricamente a “Niño Gurú” entre gritos de euforia del público, conocedores ya de este single que dio nombre al primer disco de King Sapo.
Rock en estado puro, los chicos habían comenzado una escalada transformación cambiando el registro íntimo del acústico por el torrente enérgico con el que les conocimos, haciendo imposible no saltar sobre las butacas, gritar, y cantar junto a ellos temas como el “Hombre Humo”, en el que Jesús hizo una breve pausa para cantar a capella parte del estribillo final junto al ya muy animado público, que se había contagiado del fervor que el groove de este tema emanaba.
Teniendo a sus fans en el bolsillo, prosiguieron con “Alguien Como Tu”, con una enfurecida batería que acompañaba la potencia rock orquestada por la guitarra eléctrica de Andrés y el complejo ritmo del bajo de Jose. Se despedían de su ‘Lengua Púrpura’ con “Phoenix”, tema de su último videoclip grabado en el Gato (Malasaña) por Juan Pérez Fajardo de Fly-Factory.
Y aunque parecían cerrar el concierto con “Hablando con Árboles”, que aprovecharon para felicitar el trabajo de luces y sonido así como el de la asistencia del Teatro Muñoz Seca y dar las gracias por la asistencia a su público, sin embargo volvieron para regalarnos un doble bis con “Natural Blues”, versión de Vera Hall, demostrando su dominio y poderío también en lenguas inglesas, para decirnos el adiós definitivo con “Afrodita Blues” dejándonos una sensación de lleno en nuestro interior, en un espacio que hace meses había quedado vacío.