Si os preguntase quién es D’arcy Wretzky, pongo realmente en duda que alguno de vosotros, por muy fanático de la época de los 90 y el movimiento grunge, supiera decirme quién es esta mujer. Sin embargo, si os anticipo que es la bajista de los Smashing Pumpkins (bueno, o lo fue) muchos sabréis de quien hablo.

Una banda, por cierto, emblemática y de renombre que triunfó con éxitos como «Today» o «Cherub rock» y que D’arcy abandonó en septiembre de 1999 cuando curiosamente Jimmy Chamberlin (batería) se reintegró en el grupo tras «supuestamente» rehabilitarse de su adicción a las drogas que había provocado su expulsión dentro de la banda, un personaje que por cierto, fue detenido por posesión de drogas tras una sobredosis de heroína que sufrió junto a Jonathan Melvoin, teclista de la gira en el ’96, quien sin embargo no pudo superarla y falleció. Siempre habían surgido tensiones dentro de los Smashing Pumpkins desde su éxito comercial a comienzos de los ’90, ya fuera por temas de alcohol y drogas o el ego de Billy Corgan (cantante y guitarra solista), que decidió ser el compositor principal del grupo, copando todos los instrumentos excepto la batería del álbum Gish en 1991, que además quedó eclipsado por el éxito de Nevermind de Nirvana, lo que propició un ambiente hostil entre los miembros de la banda.

Pero, realmente, nada se ha sabido de D’arcy en estos últimos veinte años, a pesar de haber sido un pilar importante dentro de la formación original de la banda, un misterio lleno de especulaciones… hasta ahora.

La bajista ha roto su silencio tras un artículo en Alternative Nation, donde Brett Buchanan, periodista musical, comenta cómo de manera cínica los Smashing Pumpins han anunciado una gira de regreso (no tocan desde el 2000) con los integrantes de la formación original, algo que efectivamente no es cierto y que está provocando que la venta de entradas sea ridícula, ya que efectivamente, D’arcy no estará presente en ella, al menos, este 2018.

Pues bien, a raíz de este artículo, un usuario «sospechoso» empezó a escribir numerosos comentarios demasiados personales a cerca de D’arcy y los Smashing, lo que dio sospechas de que fuera ella… y efectivamente, lo era, y estaba decidida además a conceder una entrevista (que según confirma ICON duró unas 4hrs.) en la cual relata su rechazo al mundo y el negocio de la música tanto como al propio Billy Corgan, líder de la banda, y su actitud.

Actualmente vive retirada en Michigan, cuidando de su establo, y lo único que se sabía hasta la fecha de ella era su detención en 2011 por conducción bajo los efectos del alcohol y unas declaraciones a una radio americana (esquivas y bastante pobres, en 2009); además sigue tocando aunque aún no se ha atrevido a grabar nada por su cuenta.

Wretzky, quien sólo ha seguido manteniendo contacto con James Iha (guitarra y cofundador de la banda), afirma, en estas declaraciones, que le han pedido que se reúna con Smashing Pumpkins en cuatro ocasiones, pero que no ha hablado con Billy Corgan desde su marcha en 1999… y sin embargo, «consideraría regresar», pero bajo ciertas condiciones (que dice, son complicadas de explicar). Algo que por cierto desmiente la banda, ya que en febrero lanzaron un comunicado:

«D’arcy Wretzky ha sido invitada repetidas veces a tocar con el grupo, participar en sesiones de grabación o reunirse con nosotros en persona y en todos los casos lo ha rechazado».

¿A quién creer? En una entrevista con Blast Echo dice haber marchado por su desinterés por la fama y por el ritmo de trabajo, que era realmente fuerte, y agravaba su TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), además de las drogas, alcohol y constantes discusiones que le provocaron fuertes episodios de ansiedad y depresión.

Por cierto, también cuenta cómo con 27 años tuvo su primer encuentro con la cocaína, durante una gira con los Rolling Stones en Texas, cuando Marilyn Manson entró con unos amigos a su camerino, donde consumieron esta droga. Otra de las anécdotas que cuenta D’arcy en la entrevista, es cuando, si bien recordamos, en 2005 Billy Corgan anunció el regreso su banda, pero acabó actuando únicamente con James Iha, un Billy, líder de la banda, que nunca le llamó para participar en el proyecto de la gira ni del nuevo álbum publicado poco después (Zeigeist, 2007).

De hecho, D’arcy declara que: “Contactaron con otra chica para que tocara mi bajo, algo muy personal para mí. Soy muy especial con mis instrumentos, por cómo suenan y por cómo sienten. Eso me cabreó muchísimo y no me enteré hasta hace poco.

¡Intentó vender mi bajo y parte de mi equipo! Tiene cojones hacer eso. Supuestamente me iba a enviar todas mis cosas, sin embargo nunca lo hizo”.

A pesar de todo, también dice estar en mejor forma que nunca: “Como sano, vivo y trabajo en una granja y he practicado todo tipo de deportes”.; y no guardar ningún tipo de odio o rencor hacia Billy, quien simplemente, le causa risa por sus formas.

Si quieres saber más, puedes encontrar todo esto en Alternative Nation, ICON (El País) y Blast Echo.