El pasado viernes 17 de Mayo disfrutamos del regreso de Martin Sánchez a los escenarios
Un espectáculo con sorpresas en el que Los Pantoja fueron invitados a abrir su concierto
La gente comenzaba a entrar en la sala cuando Los Pantoja se decidían a salir. Abriendo con gran fuerza, los chicos de Valdemoro nos demostraban que su concierto no era un juego. Quizás por su ya bagaje con otras bandas, podríamos decir que la puesta en escena y el directo fue inigualable, gracias también al trabajo del técnico de sonido que tanto en el concierto de apertura como el de Martin Sánchez supo potenciar al máximo el sonido de las melodías de cada uno de los grupos.
Los Pantoja, que contaron con el trabajo de Candy Caramelo en su disco homónimo, fueron subiendo de energía poco a poco según iban sintiendo el calor del público, que cantó con gran entusiasmo el tema más esperado del concierto, «Amor de Calavera». Pero, por supuesto, dieron un buen repaso también a su primer trabajo publicado el pasado año. Así nos hacían viajar entre unos riff que bien podrían recordarnos en ciertos matices a la esencia más Rolling, como en «Mundos Paralelos» o con influencias de géneros también independientes al rock y temas en los que también percibimos unas líneas muy funkies como «No Me Sentará Mal», que el público bailó, entrando en calor para Martin Sanchez.
Tras recoger el equipo y hacer unos pequeños ajustes, llegaba Martin Sánchez con una entrada estelar sobre el escenario. Junto a él, le acompañaban su elenco de artistas: Enric Castello Arandiga, Paco Benitez, Santi Zed y Dani Herrero a quienes se unía el joven Danny King que debutaba junto a la completa banda. Si bien en los conciertos de Radio3 pudimos atisbar en qué consistía su directo, con la apertura de «Radio Norte» del mismo modo en que comenzaba en Boite, sin embargo poder disfrutar de esta experiencia fue algo completamente inesperado.
Tal y como lo hablamos en la entrevista y reseña sobre el artista, Martin plasmaba toda su clase y elegancia en una lección que los allí presentes procuraron asimilar, mientras comenzaba a formarse una pista de baile entre el público más cercano al escenario. Así pudimos escuchar su ‘Personal Suite’ con todo detalle: desde el enérgico «Baile de Máscaras» que invitaba a la completa fiesta, hasta su «Beatriz», tema importante para la banda, que el público más fiel esperaba con ansia para conectar, cantarlo.
Con un setlist bastante largo, también hubo momentos de descanso para nuestro artista, que el resto de músicos amenizó en un instrumental muy propio de locales como El Junco, o la James Joyce donde hacen jam sessions cada semana. Así comprobamos la gran maestría de Dani Herrero, un plus que le aportó un toque diferente (y muy «jazzy») a los músicos. Además, Martin contó con un espectacular invitado de lujo: el cantante de Cadillac Solitario, que le acompañó a mitad de concierto para dar una sorpresa al público.
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